lunes, 15 de agosto de 2011

DECLARACIÓN DE HACIENDA

"Buffett, uno de los hombres más ricos del mundo y presidente del grupo Berkshire Hathaway , dijo que su factura fiscal federal del año pasado fue de 6.930.744 dólares (unos 4,8 millones de euros).

"Suena a mucho dinero. Pero lo que pagué fue sólo un 17,4 por ciento de mis ingresos gravables, y ese es un porcentaje realmente más bajo del que pagó cualquiera de las otras 20 personas en nuestro despacho. Su carga fiscal varió del 33 por ciento al 41 por ciento y de media fue del 36 por ciento", añadió."

VAMOS A VER¡¡¡¡¡¡¡¡

Nunca pensé que iba a escribir esto: mi natural violento siempre me ha sugerido que es bueno que gane más el mejor, y aún que se le premie de alguna manera significativa por crear riqueza que de uno u otro modo se acaba repartiendo.

No se, imaginaba románticamente que esa imposibilidad de los Estados de gravar proporcionalmente este tipo de magnitudes, so pena de verlas huir a lares menos agresivos era un premio elíptico a los que llegaban a la meta de la oca y seguían muchísimo más allá.Ojo a la respuesta gruesa, porque no hablo de los que desarrollan la fortuna de papa y mama, ni de los que crean sobre el sufrimiento de otros, o de los que se ven favorecidos por cualquier manifestación de la suerte, léase especulación (aunque la experiencia me dice que de estos no es necesario ocuparse: si no ocupan posición por otro mérito, lo que la suerte les da se lo quita rápidamente). Por tanto, absténgase el enfurecido antisistema que critique el demérito de la herencia, o el ecobuenista que... no esos que griten y se jodan, que si estoy de acuerdo con los jornales infantiles que ponen niños (pocos, alguno) de la Edad de Piedra a estudiar informática en India, en lugar de a jugar a soldados en Somalia o ser carne de esclavitud pedófila en Tailandia... ahora me refería, digamos, al Ministerio Fiscal que persiga al comisionista del PSOE en los contratos públicos.

Absténganse ambos, porque no son sus perseguidos los modelos que ensalzo.

Gates,Buffet, Ing. Kar. EA (incapaz de deletrearlo), ... En aras de posibilitar el desarrollo de la idea que tengo en la cabeza, acepto que estos y aún todos los del FORBES 500 no pueden ser buenos puros, y me limito a centrarme en la parte de estos que surge al crear riqueza donde no la había, de modo que su entorno prosperó por ellos.

Quien niegue este fenómeno es más ciego aún que el que lo crea niveamente puro.

Pues bien, suele ser ineluctable que esas riquezas que tanto aprovechan a los que las rodean provienen de ideas novedosas que son aún más beneficiosas y para un entorno mucho mayor¡¡¡

La percepción del enriquecimiento ineludiblemente ligado a la plusvalía como "sisa" constante y masiva del valor del trabajo de otros da paso a la admiración por la fortuna que se asocia a una brillante y productiva idea que mejora la vida de todos.

Desafío a quien se atreva a decir que los dueños de Google son ricos por robarme parte de mi trabajo a tres devastadores asaltos de pelea sin reglas.

Para mi, esos son los ricos, y no es que sea imposible materialmente someterles a carga fiscal o de tipo alguno por los Estados, sino que debería ser primer efecto de una globalización real el consorcio mundial de naciones que los albergara fiscalmente para no tener que afrontar rémoras económicas, y ello tanto como premio, cuanto como constatación de que el dinero que de estos se detrae con certeza va a ser objeto de peor uso en manos de las administraciones.

Dicho esto, veo confirmación de mis palabras en la declaración que pego al principio de estas lineas. Es que ellos mismos están por la labor¡¡¡

Veamos. Si por los liberales fuera, de impuestos, nada. Los partidarios de agrandar la estructura administrativa no son los liberales, que profesionalmente se van bandeando, ni las capas bajas del tejido productivo, que abdican en sindicatos y otras tenias su poder político, sino los representantes de dichas capas que no siendo capaces de ascender por formación, buscan hueco en que la misma ceda ante la designación. La pérdida de cargo en su caso les devuelve al lumpen , mientras que en el caso de los primeros, suele devolverles a la realidad de un bofetón, con llanto por la desaparición de moqueta y chofer, pero en poco tiempo les tiene aliviados de la cosa pública por causa de los dineros que vuelven a mejorar su hacienda.

Eso hace que unos y otros tengan diferente apego a la poltrona, y una visión diversa de lo fiscal. Se verá lo divertido de la paradoja.

El infame que teme por su asiento espabila a toda velocidad en materia económica, y aprende rápido que apretar al rico es ahuyentarle, de modo que es mejor adular y obtener limosna, aún con la velada amenaza... El extorsionado ve que paga menos de lo que le corresponde, y que si quiere aplasta al que le amenaza, pero también que eso solo le pone en un indeseado puesto de realce que nada le rinde y sólo le puede granjear enemistades, envidias y perjuicios, cuando no persecuciones si el tuercebotas de turno se pone digno.

En fin, este ha hecho secular gala de prostituir a su antojo el lenguaje, y comienza a llamar "rico" al que sólo es clase media, pero reune el triste mérito de ser quien más gane de los que no pueden sustraerse a la fiscalidad.

Imagino que un liberal radical no tendría inconveniente en aceptar, si es que no se erradica la tributación, que solo hay un 3% de ricos que merezcan una tributación agresiva, mientras que el así llamado progresista está dispuesto a hacer la vista gorda ante ese y otro 22% ai queda asegurado que el que gana más que su abuelo y su padre destripando terrones se merece el denuesto de ser "rico", y ha de quedar suficientemenmte acogotado, en castigo por su soberbia al estudiar una carrera y procurar prosperar.

Políticos. Basura.

La solución viene una vez más de los que de verdad tienen la Fuerza. No de los que la necesitan tanto como para jorobar a quien proceda con tal de ejercerla, ni de los que no la necesitan pero la quieren para llevar la comunidad a mejor destino, que suelen caer esclavizados ante su oropel.

Los que de verdad la tienen...

Una bestia parda partía a golpe de acero un acertijo segúramente interesante y de valor artístico para probar que en su época la fuerza mecánica fundaba el Poder: qué coño de nudo gordiano ni nudo gordiano, le diría el querubín al ausente Diógenes, sustituyendo con ira y soberbia la sabiduría que no pudo conseguir....

Siglos más tarde, horas, días, semanas y décadas de intrigas en pasillos, primero tenebrosos y al fin testigos de las máximas cimas del arte, refutan la vigencia de la espada como Fuerza Básica en favor del veneno primero y de los pactos después. Ni que decir iene que la sustitución de una espada por un voto en una Corte permite el ahorro de muchas vidas productivas cada vez que se aborda una toma de decisión crítica, lo que acaba extrapolado al cuerpo total del censo.

Pero no se debe olvidar que todo ello no es sino una abstracción ,una ficción utilitaria. El fuerte sigue siéndolo, el inteligente también, y si ya no operan como artífices de la decisión política (si no quieren), siempre les queda la industria¡¡¡

Ningún régimen político les ha abatido, y cuando han sufrido persecución, ha sido cuestión de tiempo que la sombra hiciera mayor aún su Poder. Alguna excepción hay, pero petroleo y Rusia no son compatibles con discotecas, modelos o coches caros: es Poder, y se conserva o se pierde, no se exhibe...

La identificación de la riqueza con la corrupción desaparece por dos motivos: primero, por la evidencia de riquezas separadas de lo público, y carentes de base hereditaria o delictiva, creadoras por tanto de valor neto; y segundo, por la diseminación universal y masiva de información, que impide ensuciar esos méritos a la vez que propicia con gran éxito que se los imite.

Los más rojos sucumben a los encantos de Steve Jobs; el metálico que falta en el tráfico Occidental y ha de resolver la actual crisis está en China; Rusia y satélites ilustran acerca de que la generación de riqueza es imparable, y de que su distribución en régimenes intervencionistas la disminuye, y es germen de que a su inevitable colapso sea injusta hasta que se alcance un nivel socionormativo equiparable al del S. XX occidental.

Y, de nuevo, están esos cien o doscientos. Se caerían los palos del sombrajo de la revista CLAVES si se tomara a los más ricos por propio mérito declaración de Renta como la realizada por Buffet, poco sospechosa de trampa o truco.

¿Es que no se dan cuenta? Esa gente es BUENA por que si no no serían creadores. Y les importará un carajo reducir su renta anual disponible en cientos de millones de euros, ya que no son capaces de gastar lo que les quede, y a diferencia de las fortunas tradicionales(=heredadas) de jeques o industriales del acero, no tienen conciencia de otro deber histórico que el de devolver la bestialidad de bienestar que han disfrutado, salvo psicopatías...

No es que niegue que sea rico el que gana 100.000.- €/año, como croan estos abrazapoltronas, sino que me parece mendicante, dependiente, aún el que gana eso al mes¡¡¡.

Se encontrará la riqueza necesaria para los grandes proyectos, para las necesidades estatales, en aquellos otros que no tienen ya porque esconderse, y de hecho están por la labor. El empeño en actuar contra quien se resiste demuestra lo errado del planteamiento que lo impulsa. El esfuerzo ha de ser patrimonio de la búsqueda de la mejora, del crecimiento. Si se crece, es fácil contribuir. Buscar contribución sin crecimiento es esforzarse en obtener lo que no existe. Pocos de los que crecen legítimamente intentan eludir su contribución y de hecho se ufanan en aumentarla con caridades públicas; sin embargo, el desgraciado que intenta descontar de su beneficio un libro o una comida no es obviamente quien esté en buena situación para contribuir, aunque es posible que si para huir total o parcialmente de la presión, con la consecuencia casi segura de que junto con si capacidad contributiva se deslocalizará también la creativa de riqueza.

No se si de aquellos verdaderamente grandes (Arango, Areces-Álvarez, Botines, March, Masaveu, Alba, ...) quedan muchos o ninguno en mi país que respondan al perfil de lucidez y generosidad que a la vez permite sus privilegios y alimenta el sistema que permite a algún otro capaz acceder a su status (si no se da esto, no hay viabilidad, lo prueba la Historia...), y sólo a ellos corresponde identificarse. Pactar con esos es el camino para resolver necesidades reales y crear estructuras fiscales sostenibles. Buffet nos lo está diciendo. Sajar al que gana 100.000 al año sólo desincentiva y ahonda odios sociales, además de ser inutil, ya que con su cuota nada se paga, y ello si no se le urge a no pagar cuota alguna.

Si hay pocos en mi país, globalicemos.

Si mi Gobierno es menos capaz de proporcionar para el común que Buffet, que me gobierne Buffet; y lo mismo digo del Corte Inglés, que hace tiempo debió tomar las riendas de este puto pais¡¡¡¡¡